Wednesday, April 26, 2006

Súplica


Este es un poema que copie no recuerdo de donde, aproximadamente el 29 de Mayo de 1982, desconozco el autor, pero es tan hermoso que deseo compartirlo hoy, además porque para enfrentar las pruebas de la vida necesitamos saber que no estamos solos.

Ayudame Señor.... sin ti soy nada
y hay penas que maltratan y atormentan
al alma y a la mente que se enfrentan
al despertar de lucha terminada.

Me elevan tus doctrinas y verdades.
Aborrezco mis fallas y flaquezas,
y tan sólo encontrar quiero las fuerzas
que me aparten de espíritus triviales.

Reconozco un poder fuerte y maligno
que me busca y me acecha sin descanso,
que me invita y tenaz extiende el brazo
para que siga el curso de lo indigno.

Tiendo a subir, y cuando verte creo,
no falta un escalón que falso caiga
para evitar que en mi vasija haya
la belleza que entonces siento y veo.

Debilidad, palabra que destruye
la voluntad, la fuerza, la creencia;
palabra que aborrece la conciencia
porque entorpece, debilita influye.

No apartes de mi vida tu mirada
que apoya, eleva y alimenta al alma.
Hazme sentir esa infinita calma
que transforma la noche en alborada.

Para poder vencer la misma muerte,
enséñame a ignorar las tentaciones.
Se Tú mi luz en negras opresiones,
y de mi sed mortal sé eterna fuente!

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